Los terremotos son movimientos bruscos de la tierra causados por la liberación de energía en la corteza terrestre. Esta energía se acumula debido a la fricción entre las placas tectónicas, que son grandes bloques de la corteza que se mueven lentamente. Cuando la tensión se vuelve demasiado alta, se produce un temblor que puede variar en intensidad. Los terremotos se miden en la escala de Richter o en la escala de Moment Magnitude. Pueden causar daños significativos a edificios, infraestructuras y pueden provocar tsunamis si ocurren bajo el agua. La preparación y la respuesta adecuada son esenciales para minimizar sus efectos en las comunidades afectadas.