El liderazgo democrático es un estilo de liderazgo en el que el líder fomenta la participación activa de los miembros del grupo en la toma de decisiones. Este enfoque promueve un ambiente de colaboración, donde se valoran las opiniones y sugerencias de todos, lo que puede aumentar la motivación y el compromiso del equipo. En este tipo de liderazgo, el líder actúa más como un facilitador que como un autoritario. Se busca construir consenso y se toman decisiones en conjunto, lo que puede llevar a soluciones más creativas y efectivas. Este estilo es común en entornos como organizaciones no gubernamentales y equipos de trabajo en empresas.