La Sociedad de Naciones fue una organización internacional creada después de la Primera Guerra Mundial en 1920. Su principal objetivo era promover la paz y la cooperación entre los países, evitando futuros conflictos. La idea surgió en el contexto del Tratado de Versalles, que buscaba establecer un orden mundial más estable. A pesar de sus esfuerzos, la Sociedad de Naciones enfrentó varios desafíos, como la falta de participación de potencias importantes y la incapacidad para prevenir la Segunda Guerra Mundial. Finalmente, fue disuelta en 1946 y reemplazada por las Naciones Unidas, que continuaron con el objetivo de mantener la paz y la seguridad internacional.