El triptofano es un aminoácido esencial que el cuerpo humano no puede producir por sí mismo. Se obtiene a través de la dieta, principalmente de alimentos como el pavo, el pollo, los lácteos, los huevos y algunas nueces. Este aminoácido es fundamental para la producción de serotonina, un neurotransmisor que regula el estado de ánimo, el sueño y el apetito. Además de su papel en la producción de serotonina, el triptofano también es precursor de la melatonina, una hormona que ayuda a regular el ciclo del sueño. La ingesta adecuada de triptofano puede contribuir a mejorar la calidad del sueño y el bienestar emocional, aunque su efecto puede variar según la persona.