Primera República Francesa
La Primera República Francesa fue establecida en 1792 tras la caída de la monarquía en Francia. Este periodo se caracterizó por la abolición de la monarquía absoluta y la proclamación de la soberanía popular. La república enfrentó numerosos desafíos, incluyendo guerras externas y conflictos internos, que llevaron a la radicalización de su gobierno.
Durante su existencia, la Primera República experimentó cambios significativos, como la creación de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano en 1789. Sin embargo, terminó en 1804 cuando Napoleón Bonaparte se proclamó emperador, marcando el fin de la república y el inicio del Primer Imperio Francés.