El método LIFO (Last In, First Out) es una técnica de gestión de inventarios que sugiere que los últimos artículos en ser añadidos al inventario son los primeros en ser vendidos o utilizados. Este enfoque es común en industrias donde los productos pueden tener una vida útil limitada, como en la alimentación o la farmacéutica. En la contabilidad, el método LIFO también se utiliza para calcular el costo de los bienes vendidos. Al aplicar este método, las empresas pueden reflejar un costo más alto en tiempos de inflación, lo que puede resultar en una menor carga fiscal. Sin embargo, puede no ser aceptado en todos los países debido a normativas contables.