Los herbicidas son productos químicos diseñados para eliminar o controlar el crecimiento de plantas no deseadas, comúnmente conocidas como malezas. Se utilizan en la agricultura, jardinería y paisajismo para proteger cultivos y mantener áreas limpias. Existen diferentes tipos de herbicidas, que pueden ser selectivos, actuando solo sobre ciertas plantas, o no selectivos, que afectan a todas las plantas en su camino. El uso de herbicidas puede aumentar la productividad agrícola al reducir la competencia por nutrientes y agua. Sin embargo, su aplicación debe hacerse con cuidado para evitar efectos negativos en el medio ambiente y la salud humana. La regulación de herbicidas es importante para asegurar su uso seguro y efectivo en la agricultura moderna.