Los cartones de leche son envases diseñados para almacenar y transportar leche. Generalmente están hechos de cartón, un material ligero y reciclable, y están recubiertos con una capa de plástico o aluminio para proteger el contenido de la luz y el aire. Esto ayuda a mantener la frescura y prolongar la vida útil de la leche. Estos envases vienen en diferentes tamaños, desde pequeños de un litro hasta grandes de varios litros. Además de la leche, los cartones también se utilizan para otros líquidos, como jugos y bebidas vegetales. Su diseño permite un fácil vertido y almacenamiento en el refrigerador.