La caja torácica es una estructura ósea que protege los órganos vitales en el torso, como el corazón y los pulmones. Está formada por las costillas, el esternón y las vértebras torácicas. Su función principal es proporcionar soporte y protección, además de permitir la expansión y contracción durante la respiración. Las costillas son huesos curvados que se articulan con la columna vertebral y se conectan al esternón en la parte frontal. La caja torácica también juega un papel importante en la respiración, ya que su movimiento ayuda a crear el espacio necesario para que los pulmones se inflen y desinflen.