Las articulaciones esféricas, también conocidas como articulaciones en bola y cavidad, son un tipo de articulación que permite un amplio rango de movimiento en múltiples direcciones. Estas articulaciones se componen de una cabeza esférica que encaja en una cavidad, lo que permite la rotación y el movimiento en varias dimensiones. Un ejemplo común de este tipo de articulación es la articulación del hombro. Este diseño anatómico proporciona gran flexibilidad y movilidad, lo que es esencial para actividades como levantar los brazos o girar el torso. Además de la articulación del hombro, otra articulación esférica importante es la articulación de la cadera, que también permite movimientos amplios y variados.