Los ventiladores son dispositivos mecánicos diseñados para mover el aire y proporcionar una sensación de frescura en espacios cerrados. Funcionan mediante un motor que hace girar aspas, creando un flujo de aire que ayuda a regular la temperatura y mejorar la circulación del aire en una habitación. Existen diferentes tipos de ventiladores, como los de techo, de pie y de mesa, cada uno con características específicas para adaptarse a diversas necesidades. Son una alternativa eficiente y económica a los sistemas de aire acondicionado, ya que consumen menos energía y son más fáciles de instalar y mantener.