Los cortes de apelación son tribunales que revisan decisiones tomadas por tribunales inferiores. Su función principal es asegurar que se haya aplicado correctamente la ley y que se hayan respetado los derechos de las partes involucradas en un caso. Estas cortes pueden confirmar, modificar o anular las decisiones previas. En muchos sistemas legales, las cortes de apelación no vuelven a examinar las pruebas del caso, sino que se enfocan en cuestiones legales. Esto significa que su análisis se centra en si se cometieron errores en la interpretación o aplicación de la ley durante el juicio original.